Pero ahora se encuentra en el Museo Británico de Londres, y que, como muchas otras, fue "trasladada" por el conde Elgin de Atenas a Londres con la "buena intención" de protegerlas de la barbarie de la guerra, y las vendió al museo Británico en 1816.
El debate sobre la reunificación de los mármoles se ha mantenido siempre vivo en el Reino Unido, donde han proliferado los “comités” a favor de la devolución de las obras, y figuras relevantes del mundo de la política, el arte o la literatura han defendido lo que una mayoría de ciudadanos, encuesta tras encuesta, admiten como la solución lógica y justa: el regreso de los mármoles al Partenón.
Hace unos días, un grupo de técnicos han llevado a cabo una copia exacta en impresión 3D de dicha cabeza, que ha quedado perfecta, aunque excesivamente blanca.
¿Convencerán al gobierno británico para que devuelva la cabeza original, y todas las piezas que se llevaron, a su lugar de origen?
Estaremos pendientes de cómo acaba la historia.
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